Los vuelos humanitarios ayudaron a probar las medidas de bioseguridad antes de la reapertura de vuelos comerciales, prevista para el 26 de junio
El Aeropuerto Internacional de Tocumen prepara sus instalaciones para recibir a los pasajeros de vuelos comerciales, una vez que las autoridades den luz verde a las actividades contempladas en el bloque 4.
Así lo informó Claudio Dutary, gerente de operaciones de la principal terminal aérea de Panamá, durante el webinar «La nueva realidad de los viajes aéreos», realizado por el Comité de Turismo de AmCham, donde participaron otros representantes del sector como la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés), las aerolíneas Copa Airlines, Delta y Air Europa, quienes analizaron las medidas que se tomarán para proteger a los usuarios del COVID-19 y devolverles la confianza en el transporte aéreo.
«Tenemos una coordinación permanente con el Ministerio de Salud y concesionarios comerciales y estamos tomando medidas que consideramos temporales y que son necesarias e imprescindibles para poder garantizar la bioseguridad», indicó Dutary. Hasta ahora se tiene previsto que los vuelos comerciales comiencen a operar el 26 de junio.
Explicó que han configurado las salas de embarque en el área central, así como otros sectores como Migración y Aduanas, para garantizar que los pasajeros guarden el distanciamiento social, como parte de las medidas tomadas, y que han sido probadas durante la realización de los vuelos humanitarios y de carga, los cuales se han mantenido operativos en medio de la pandemia.
Las operaciones regulares se iniciarán de manera secuencial, de acuerdo con la demanda. Primero se utilizará la Terminal de Pasajeros T1 en dos fases: A1, área central y 1b, muelle norte. Los vuelos se despacharán en dos y hasta tres salas de embarque (dependerá del tamaño de las aeronaves) en lugar de una para guardar el distanciamiento social.
Otras acciones esenciales que se tomarán son la disminución de la cantidad diaria en bancos operativos, control de aforo en baños y elevadores, demarcaciones en piso (por orden y distancia), parantes de separación (barrales, biombos, paneles, mamparas para mostradores, etc), así como señalética estática (letreros) y dinámica (display).
Esto se añade a los protocolos de seguridad que se han establecido durante la realización de los vuelos humanitarios y de carga, como el uso de la mascarilla (que será obligatorio para todos los usuarios y pasajeros en todas las instalaciones), dispensadores de alcohol en gel, alfombra de sanitización, el distanciamiento social, higienización permanente, control de temperatura y cámaras termográficas.
Se instalará además un sistema de limpieza y desinfección permanente en mostradores, sillas, pisos, baños, entre otros. La terminal aérea también estudia otras acciones como la sanitización del equipaje de bodega, así como de carga y correo. Dutary es optimista con la reapertura de las operaciones comerciales.
«Se han tomado medidas y yo creo que esto tiene que darle seguridad a nuestros pasajeros y confianza para retomar el futuro. Panamá tiene una vocación natural de punto de conexión, de centro neurálgico de las Américas. Esta crisis no debe ser otra cosa que una oportunidad para aprovechar nuestras fortalezas. Yo creo que nos vamos a recuperar y debemos trabajar de la mano todos para lograrlo pronto».