La asignación presupuestaria a la ATP sufrió un recorte de más de 60%. Entre las obras que entregará este año está el Centro de Convenciones de Amador
La Autoridad del Turismo de Panamá (ATP) contará con un presupuesto este año de $41 millones, 950 mil 445 para impulsar al sector, uno de los más afectados por el Covid-19.
Durante la presentación del informe de rendición de cuentas correspondiente a 2020, Iván Eskildsen, administrador general de la Autoridad del Turismo de Panamá (ATP) indicó que la solicitud inicial del presupuesto 2021 fue por $82 millones 671 mil 628 para inversiones, pero los recortes presupuestarios lo redujeron en más del 60%, lo que limita la capacidad de acción.
Entre las inversiones previstas se encuentra la culminación del Centro de Convenciones Amador ($15 millones 907 mil 371), obra que anunció será entregada este año. Además también están en agenda el relanzamiento del Circuito del Café; la asistencia técnica para la puesta en marcha de la estrategia de 1000 km de Senderos y un plan de seguridad turística, que incluye seis destinos.
La ATP dio a conocer la pirámide estratégica para el período 2020-2025, que incluye entre sus metas:
Un Panamá más conocido, a través de su promoción como destino turístico en mercados internacionales y en el país, utilizando como herramientas la comunicación en mercados emisores, impulso en los canales de comercialización, sensibilización y cultura turística, infraestructura de mercadeo e impulso a la identidad marcaria.
Un Panamá más competitivo, mediante el aseguramiento de una mayor eficiencia de las administraciones turísticas y la dotación a las empresas y destinos de más y mejores herramientas y recursos para competir, con medidas como la capacitación turística, desarrollo y diversificación de producto, apoyo al emprendimiento turístico, mejora de infraestructuras, inteligencia de mercados, apoyo a la inversión privada, apoyo a la innovación y tecnología y fortalecimiento de la sostenibilidad en la industria.
Un turismo más descentralizado: Redireccionar los impactos positivos del turismo hacia todos los territorios y destinos del país, a través del apoyo a gremios y autoridades locales, mejora de la calidad de vida de comunidades locales, gestión y planificación territorial coordinada con estrategias nacionales.
Una política turística de Estado: Garantizar la continuidad en el tiempo de las estrategias diseñadas, independientes de los cambios políticos, el fortalecimiento institucional, reforma del marco legal y regulatorio.
Acciones realizadas
Eskildsen señaló que la Estrategia pos-Covid-19, período 2020-2021, está sustentada en tres grandes líneas operativas: apoyo financiero, capacitación y estimulación de la demanda.
El apoyo financiero incluye bono solidario para personas registradas en la ATP y colaboradores de empresas turísticas registradas, así como un programa del Banco Interamericano de Desarrollo (BID para Pymes) con una inversión de $150 millones, entre otras medidas.
Anunció además que en 2020 se priorizaron acciones de respaldo al sector, como el proyecto de Ley 388, aprobado esta semana en segundo debate en la Asamblea Nacional, que establece medidas transitorias de apoyo a las agencias de viaje.
En cuanto a la capacitación del personal explicó que el año pasado se promovieron cursos de inglés para los colaboradores del sector y otros como pilares de marketing y redes sociales, a través del programa Coursera para gobiernos. Además la ATP capacitó a más de 80 guías de turismo general de diferentes regiones del país.
Protocolos de Bioseguridad: Panamá obtuvo el sello Safe Travels como destino seguro y este año se procederá a su implementación en los diferentes operadores turísticos. Hasta el momento, más de 60 empresas, la mayoría hoteles, han obtenido el sello.