El número de proyectos de inversión extranjera directa y las tasas de creación de empleo del clúster del turismo se incrementaron en 23 %, pasando de las 286 inversiones de 2021 a 352 registradas en 2022.
El sector turismo a nivel mundial parece dejar atrás las cifras rojas alcanzadas en 2020 durante la pandemia del Covid-19. Un informe conjunto de la Organización Mundial del Turismo (OMT) y FDI Market Intelligence destaca un repunte en proyectos de inversión extranjera directa de 25% entre 2021 y 2022, gracias a la recuperación de la llegada de turistas internacionales. Entre 2018 y 2022 , el sector hotelero y turístico representó casi dos tercios de los proyectos del clúster del turismo.
El informe revela también que tanto el número de proyectos de inversión extranjera directa como las tasas de creación de empleo del clúster del turismo se incrementaron en 23%, pasando de las 286 inversiones de 2021 a 352 registradas el año pasado. En 2022, la creación de empleo relacionada con la inversión extranjera directa en turismo también aumentó 23% en el mismo período, lo que supone alrededor de 36 mil 400 puestos de trabajo.
El año pasado, Europa Occidental fue el principal destino de los proyectos de inversión extranjera directa en turismo, con 143 inversiones previstas por un valor estimado combinado de 2 mil 200 millones de dólares. En la región de Asia y el Pacífico la cantidad de proyectos anunciados el año pasado creció ligeramente 2,4% hasta los 42 proyectos.
Las regiones de América del Norte y Asia y el Pacífico contribuyen cada una con tres empresas en el top 10 de la inversión extranjera directa en el turismo entre 2018 y 2022. El resto de las empresas de la lista proceden de Europa, con el grupo español Meliá, los británicos Intercontinental y Selina y el francés Accor entre ellos.
Jacopo Dettoni, editor de FDI Intelligence, considera que ahora se debe hacer frente a la mayor amenaza como el cambio climático y las exigencias en materia de sostenibilidad que de él se derivan.
Para Zurab Pololikashvili, secretario general de la OMT, otro de los aspectos que se debe tomar en cuenta es la formación de los colaboradores. «Para garantizar el crecimiento y la competitividad del sector es preciso invertir considerablemente en la formación y el perfeccionamiento de las aptitudes profesionales del personal e implantar programas técnicos y de formación profesional. Es la única manera de dotar a los jóvenes —entre los que solo un 50 % ha completado la enseñanza secundaria— de los conocimientos y competencias que necesitan para prosperar en el sector. Estas inversiones allanarán el camino para que contemos con profesionales que puedan impulsar el crecimiento y la innovación de forma extraordinaria».
Natalia Bayona, directora ejecutiva de la OMT, agrega que también se le debe dar prioridad a la innovación, la formación y la inversión estratégica «los pilares que nos ayudarán a reajustarnos y adaptarnos a estas dinámicas de mercado en permanente evolución. Encabezamos una serie de iniciativas orientadas a dotar a los profesionales del sector de nuevas competencias, mediante programas de perfeccionamiento de las aptitudes y de formación profesional, para crear empleo de calidad y aumentar el salario medio en toda la cadena de valor del turismo».
