Una de las galerías está destinada a los océanos divididos; otra a la red viviente y la tercera es sobre Panamá como un museo de la naturaleza por su biodiversidad
El Biomuseo de Panamá diseñado por el famoso arquitecto Frank Ghery y que abrió sus puertas en 2014, ubicado en la Calzada de Amador, ahora cuenta con tres nuevas galerías para hacer honor a la naturaleza, a los océanos y a la diversidad de Panamá.
Las exhibiciones resaltan la riqueza del ecosistema marino y terrestre panameño, con el fin de educar a los visitantes sobre la preservación de especies y la importancia del surgimiento del istmo para la biodiversidad mundial. A su vez, muestran a Panamá como fuente inagotable de lugares por descubrir.
Juan Carlos Fábrega Roux, presidente de la Fundación Amador, señaló que la exposición “Océanos divididos” muestra a través de dos tanques oceánicos y dos peceras que albergan aproximadamente 150 especies marinas, entre peces e invertebrados, la historia de uno de los eventos más revolucionarios en la biodiversidad marina: el surgimiento del istmo de Panamá.
Además, mostrará cómo la división creada por este evento geológico repercutió sustancialmente en la evolución de los ecosistemas del Mar Caribe y del Océano Pacífico.
Mientras que la exposición La Red Viviente, una enorme escultura de 15 de metros de altura, que es la protagonista de la exhibición, expone la inmensa biodiversidad que posee el bosque húmedo tropical de la Isla de Barro Colorado. La escultura fue diseñada y curada por panameños, con el apoyo de científicos del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales y fue construida por Blue Rhino Studio de Minneapolis, Estados Unidos.
Igualmente destacó que la exposición «Panamá es el museo» es la única galería de este estilo en la región. La misma combina sensores de movimientos y pantallas táctiles para llevar al visitante a descubrir la relación entre la diversidad biológica con la diversidad cultural panameña. Una forma diferente y revolucionaria por la cual los visitantes del museo se podrán dejar asombrar de todo lo que Panamá tiene para ofrecerle al mundo.
“Estas nuevas galerías que componen el Biomuseo buscan mostrar a Panamá como una fuente inagotable de lugares por descubrir y la importancia de protegerlos. A la vez le muestran al visitante la delicada red que es la naturaleza y el riesgo en el que est0a se encuentra”, resaltó Fábrea.
El Biomuseo es un proyecto impulsado por la Fundación Amador, organización sin fines de lucro, con el respaldo de los ciudadanos, empresas y el Gobierno de Panamá, con el apoyo científico del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales y de la Universidad de Panamá. Fue diseñado por Frank Gehry y está ubicado en la entrada del Pacífico del Canal en la Calzada de Amador.
El presidente de la República, Juan Carlos Varela, junto con otras personalidades acudieron a la ceremonia de inauguración, donde además el mandatario le impuso la Orden Belisario Porras, en Grado de Gran Oficial, al doctor Rodrigo Eisenman por su brillante trayectoria al servicio de la sociedad panameña y el país.
El Mandatario resaltó que Eisenman, uno de los fundadores de la Fundación Amador, con trabajo y dedicación imprimió la mística necesaria para que hoy los panameños podamos contar con este museo de primer mundo, en un lugar privilegiado, diseñado por uno de los arquitectos más famosos del mundo, que es un orgullo para el país.
Resaltó los méritos personales, profesionales y ejecutorias de Eisenman, odontólogo de profesión, fundador del Servicio de Periodoncia en la Caja de Seguro Social, miembro de la Comisión que fundó la Facultad de Odontología de la Universidad de Panamá, de la que fue Decano entre 1970 y 1974; y el primer profesor de las cátedras de Histología y Periodoncia.
Destacó además que desde el año 1997 Eisenman ha sido un gran promotor del Biomuseo y como miembro de la Fundación Amador ha ocupado diversos cargos dentro de esa organización. Fue su primer Presidente entre los años 2000 y 2002, Director Ejecutivo, miembro de la Junta Directiva, y del Comité Ejecutivo y es Presidente Honorario desde 2016.
“Su determinación y dedicación fueron claves para que hoy Panamá cuente con el Museo de la Biodiversidad”, sostuvo.
“La ciencia, la cultura y la historia están de fiesta esta semana, apenas ayer inauguramos el primer edificio del Museo de la Democracia y la Libertad y hoy estamos aquí para inaugurar tres nuevas galerías del Biomuseo, denominadas: Océanos Divididos; La Red Viviente y Panamá es el Museo”, dijo Jefe del Ejecutivo previo a la condecoración impuesta a Eisenman.
Destacó que el proyecto se empezó a construir en el año 2004, muchas dificultades hubo para lograr lo que hoy se considera un lugar de referencia para los panameños y turistas que visitan nuestro país. “Los miembros de la Junta Directiva del Museo y de la Fundación Amador, saben que a lo largo de la construcción del proyecto las críticas no dejaron de llegar, pero sólo la fe en que se estaba trabajando por algo que valía la pena y que daría frutos para todos los panameños hizo que siguieran adelante en el esfuerzo que hoy alcanza un final feliz”, señaló.
Para el presidente Varela, en este museo se conjuga el esfuerzo de todos, del Estado que aportó recursos y el terreno, de la empresa privada que ha creído en la cultura y la ciencia, en los miembros de la Fundación Amador que, a pesar de las críticas, siguieron adelante, entregándonos esta hermosa y moderna estructura que destaca la importancia de este pequeño istmo que con su surgimiento transformó la conformación de los océanos, el clima, la vegetación y la fauna mundial.