En Washington las fuertes lluvias, con ráfagas de viento de hasta 120 kilómetros por hora, obligaron al gobierno a suspender los servicios administrativos federales
Desde este jueves, la costa atlántica de EEUU se encuentra en estado de alerta, debido a una nueva tormenta invernal que azota el país y que se espera sea peor que el ciclón bomba que afectó a esa región en enero de este año.
Los vientos huracanados y las fuertes lluvias y nevadas ocasionadas por el fenómeno conocido como Nor´easter han obligado a las autoridades a cancelar más de 2 mil 600 vuelos nacionales e internacionales, además de generar el atraso de más de mil 500.
En el aeropuerto LaGuardia, Nueva York, la mitad de los vuelos fueron cancelados, al igual que más de 20% de los vuelos programados desde y hacia los aeropuertos John F. Kennedy y Newark.
En Washington, los vientos alcanzaron los 120 kilómetros por hora, lo que obligó al gobierno a interrumpir sus servicios administrativos y suspender las clases. El servicio de trenes también fue detenido en varias ciudades.
Las autoridades prevén que la velocidad de los vientos podría igualar a los producidos por el huracán Sandy en 2012. Algunos meteorólogos advierten una caída repentina de la presión este viernes en la noche frente a la costa atlántica.
También han alertado a los residentes de las zonas costeras sobre la posibilidad de inundaciones. En Duxbury al sur de Boston, las autoridades pidieron a los residentes a evacuar la zona lo más pronto posible.
Los reportes meteorológicos indican que mar adentro el oleaje podría alcanzar una altura de nueve metros, ya que la tormenta coincide con la luna llena.
Con información de agencias