El sector de la carga aérea sigue mostrando signos de fortaleza en 2024, con tarifas que continúan en ascenso gracias a un notable crecimiento de la demanda. En julio, las tarifas globales experimentaron un incremento interanual del 20%, alcanzando un promedio de $2.66 por kilogramo, según datos de Xeneta. Este repunte se ha visto impulsado por el auge del comercio electrónico, especialmente desde Asia, y por una recuperación en la actividad económica global que contrasta con la débil base de demanda registrada en 2023.
Demanda sostenida y capacidad limitada
En julio, los volúmenes globales de carga aérea crecieron un 13% interanual, con un fuerte desempeño en rutas clave como las que conectan Medio Oriente y Asia Central con Europa. Estas rutas lideraron el crecimiento, con tarifas que se dispararon un 126%, alcanzando los $3.16 por kilogramo. Las interrupciones en el Mar Rojo, que han afectado los tiempos de tránsito de los buques portacontenedores, han sido un factor clave que ha mantenido las tarifas de carga aérea elevadas. Además, los recientes disturbios en Bangladesh, que han generado grandes retrasos en puertos y aeropuertos, podrían seguir presionando al alza las tarifas en las próximas semanas.
Por otro lado, la oferta de capacidad aérea se mantuvo rezagada con un crecimiento de apenas un 2% interanual, lo que ha generado un aumento en el factor de carga dinámica, que alcanzó el 59% en julio. Este desajuste entre oferta y demanda ha reforzado la presión sobre las tarifas, especialmente en rutas con alta demanda como las que conectan el Sudeste Asiático con América del Norte y Europa, donde las tarifas se duplicaron en comparación con el año pasado, situándose en $5.78 y $3.85 por kilogramo, respectivamente.
Rutas de retorno y temporada alta de verano: una tregua para las tarifas
A pesar del panorama general de aumento en las tarifas, las rutas de retorno y las transatlánticas han mostrado descensos interanuales en sus tarifas spot. Esto se debe a la capacidad adecuada en los tramos de retorno y al incremento de vuelos de pasajeros, lo que ha añadido capacidad de bodega adicional durante la temporada alta de verano. A medida que las aerolíneas han ajustado su capacidad para satisfacer la demanda de viajes, esto ha aliviado en parte la presión sobre las tarifas de carga en esas rutas.
Perspectivas para el resto de 2024
Se espera que el crecimiento interanual de la demanda de carga aérea continúe su tendencia alcista durante agosto y septiembre, en parte debido a la base baja registrada en el mismo período del año pasado. Sin embargo, persisten riesgos para la estabilidad de la cadena de suministro, como las interrupciones en el Mar Rojo y posibles huelgas portuarias en Hamburgo y en las costas Este y del Golfo de EEUU. Estos eventos podrían coincidir con la temporada alta de la carga aérea, lo que aumentaría aún más las tarifas en un momento crítico para el comercio internacional.
A medida que el mercado de contenedores se enfrenta a menores tarifas y tiempos de reserva más fáciles, la carga aérea sigue siendo una opción atractiva para los envíos urgentes y de alto valor, especialmente con la anticipación de la temporada pico de fin de año y las festividades en China como la Semana Dorada en octubre.
El sector de la carga aérea, aunque sujeto a desafíos, se perfila como un actor clave en las cadenas de suministro globales, impulsado por una fuerte demanda, capacidad limitada y disrupciones que continúan alterando las rutas marítimas tradicionales.